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miércoles, 19 de enero de 2011

Distintas maneras de verlo

Dicen que el amor depara las dos máximas adversidades: querer a quien no te quiere y ser querido por alguien a quien no amas.
Quien ha vivido las dos, podría decir casi a ciencia cierta cuál es la peor que puedes sufrir. Enamorarte de quien no debes es horrible, un dolor dulce, un camino de llantos, sientes que nada tiene sentido sin esa persona, podrías morir por ella, la recuerdas a cada segundo y cada segundo es como si te clavaran una astilla en lo más hondo de tu ser, en tu corazón, la hubieras querido como a nadie... pero tú no fuiste el elegido y no puedes hacer nada… no eliges de quien te enamoras…
Sin embargo la persona amada por alguien a quien no quiere… es más que horrible… es una tortura continua sobre todo cuando esa persona te importa, porque quieres que este bien, que no sufra, y tú tienes la llave, la puerta, la posibilidad de aplacar todo su sufrimiento, sus llantos sus noches en vela; tu puedes decirla “si, te quiero” y que ese sea el día más feliz de su vida… pero sabes que no debes… en el fondo tus sentimientos no han cambiado, lo quieres solo como una amigo, no lo amas y eso no se puede cambiar, podrías cogerle cariño, sí, pero no sería amor y sin amor nada funciona, es más hay veces que el amor ni siquiera es suficiente… entonces lo único que conseguirías seria retrasar un poco más el sufrimiento que luego sentiría e incrementarlo gracias a que ya ha probado la bebida prohibida.. De verdad serias capaz de hacerlo? De verdad estarías demostrándola con ello que lo quieres? , no eliges de quien te enamoras…
Si te enamoras del ser indebido, tú no tienes la culpa, pero el opuesto tampoco de no poder enamorarse de ti…entonces… a quien echar la culpa? Al amor, tan caprichoso como siempre metiéndose en los corazones, enfermándolos y no ser capaz de darles su medicina… solo se la administra a unos pocos afortunados.

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